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Cuadros para Organizar
la Información

Introducción


Durante tu trayectoria como estudiante seguramente has visto en libros, artículos y presentaciones algunos recursos que contribuyen a presentar la información, como esquemas, cuadros y mapas.



Estos recursos contribuyen a que la información sea mejor percibida y se facilite su comprensión, primero para quien los elabora y, después, para poder explicarlos y transmitir un mensaje a otros.

En esta unidad se revisarán tres tipos de cuadros (sinóptico, descriptivo y comparativo) que puedes utilizar durante tu estudio, con la finalidad de que constituyan una herramienta que te ayude organizar contenidos y hacerlos más accesibles para aprenderlos.


Identificar la utilidad de los cuadros sinóptico, comparativo y descriptivo, para organizar información y facilitar el estudio, considerando sus características y propósitos.

Organizar para aprender


Para tener buenos resultados académicos es relevante que durante tu trayectoria desarrolles estrategias de aprendizaje.

De acuerdo con Díaz Barriga (2002): “Las estrategias de aprendizaje son procedimientos que un aprendiz emplea de forma consciente, controlada e intencional como instrumentos flexibles para aprender significativamente y solucionar problemas” (p. 234).


Un aspecto que te ayuda a aprender es tener organizada la información, ya que eso te permite percibir los contenidos con una estructura y hacer más evidentes los elementos clave para comprenderlos e integrarlos al conocimiento que ya tienes.


Organizar la información te ayuda a comprenderla y asimilarla, por ello, las técnicas que permiten esta organización pueden formar parte de tus estrategias para aprender.

Hay diversos tipos de organizadores: esquemas, cuadros, mapas, diagramas, líneas de tiempo, entre otros. En esta oportunidad revisaremos tres tipos de cuadros, para qué puedes utilizarlos y cómo elaborarlos.

Actividad 1. Distintos cuadros para distintos propósitos

Una opción para organizar la información y emplearla para el estudio son los cuadros, ya que permiten concentrar contenidos acerca de un tema y acceder a ellos de manera más ágil. Puedes realizar cuadros como parte de tus notas.

Un criterio para decidir si es pertinente elaborar un cuadro es el propósito que persigues. Por ejemplo, el cuadro no tendrá las mismas características si deseas describir un método o si requieres compararlo con otros métodos.

Observa los siguientes cuadros que organizan información e identifica qué propósito se persigue con cada uno.

Arrastra las opciones al ejemplo que corresponda.

Tipos de cuadros


Algunos de los principales cuadros que puedes utilizar son: sinóptico, descriptivo y comparativo. A continuación se presentan sus principales características.


En la actividad 1 puedes revisar algunos ejemplos. Aquí tienes otros:



Quizá ya te percataste que los cuadros descriptivo y comparativo son similares; en realidad sus diferencias son muy sutiles. Justamente radica en el propósito, pues si bien al describir puedes comparar, la comparación te permite generar una conclusión, aunque no siempre se coloca de manera explícita.

¿Para qué puedo utilizar estos cuadros?


Estos tres tipos de cuadros sirven para organizar la información.

Por sus características, cada tipo de cuadro te puede servir para:

¿Cómo elaborar cada tipo de cuadro?


Para realizar un cuadro sinóptico te recomendamos seguir los siguientes pasos (Pimienta, 2012):



Pasos para realizar un cuadro sinóptico. Elaboración propia con base en Pimienta. (2012). p. 24.

En caso de que emprendas la elaboración de un cuadro descriptivo, puedes seguir estos pasos:



Pasos para realizar un cuadro descriptivo.

Si te parece pertinente realizar un cuadro comparativo, te sugerimos este procedimiento:

Pasos para realizar un cuadro comparativo. Elaboración con base en Pimienta. (2012). p. 27.

Recuerda que puedes adaptar estos cuadros para que respondan a tus propósitos, en algunos casos puedes incorporar imágenes, esquemas o notas, así como establecer conclusiones, fuentes de información, etcétera.


Integra los cuadros a tus estrategias para aprender


Como se indicó al inicio del tema, las estrategias de aprendizaje son procesos en los que tomamos decisiones respecto a cómo y con qué vamos a aprender. Estas decisiones siempre están orientadas a un propósito o demanda determinada, es decir, a una meta que deseamos cumplir. (Monereo, Castelló, Clariana, Palma y Pérez, 2009)

Toma en cuenta que, como estudiante, estas metas van más allá de aprobar exámenes, ya que, si bien éstos son requisitos institucionales, siempre debes tener presentes los objetivos más trascedentes para tu vida profesional y tener en la mira el aprendizaje de todo aquello que abona a tu futuro desempeño profesional y laboral. Así, cuando te enfrentes a una situación “real”, es más importante poder utilizar lo que aprendiste que haber obtenido una determinada calificación, por ello, ¡pon todo tu empeño para aprender y nunca dejar de hacerlo!


Los tipos de cuadros revisados no los debes elaborar como “una tarea” u obligación, sino concebirlos como una herramienta que contribuye a lograr tus metas de aprendizaje.



Organizar para aprender


Es importante que identifiques en qué situaciones te son útiles; empléalos cuando lo consideres pertinente, cuando te parezca que facilitan la comprensión y asimilación de lo que estás estudiando. Si lo haces de esta manera estarás integrando los cuadros a tus estrategias de aprendizaje y no sólo aplicando técnicas de manera mecánica.

Organizar la información te ayuda a organizar tu mente.

Actividad 2. ¡Recomienda un cuadro!

Como has visto, los cuadros que organizan información te ayudan a resolver situaciones en tu vida académica.

¿Qué tipo de cuadro recomendarías realizar en cada caso?

Lee los siguientes casos e indica qué tipo de cuadro sería más útil para la situación descrita.

Autoevaluación. ¿Qué tipo de cuadro es?

Ahora que ya conoces la utilidad de cada uno de los cuadros para organizar información, identifica de acuerdo con sus características, qué tipo de cuadros son los que a continuación se presentan.

Fuentes de información

Básicas

Bibliografía

Díaz, F. y Hernández, G. (2002). Capítulo 5. Estrategias de enseñanza para la promoción de aprendizajes significativos (pp. 137-229). En Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. Una interpretación constructivista (2.ª ed.). México: McGraw Hill.

Monereo, C. (coord.), Castelló, M., Clariana, M., Palma, M. y Pérez, M. L. (2009). 1. Las estrategias de aprendizaje: ¿Qué son? ¿Cómo se enmarcan en el currículum? (pp. 11-44). En Estrategias de enseñanza y aprendizaje. Formación del profesorado y aplicación en la escuela. México: Grao-Colofón.

Pimienta, J. (2012). Estrategias de enseñanza-aprendizaje. México: Pearson Educación.

Pimienta, J. (2008). Constructivismo. Estrategias para aprender a aprender (3.ª ed.). México: Pearson Educación.



Complementarias

Documentos electrónicos

Quesada, R. (2011). Lecturas para aprender mejor. México: CUAED–UNAM. Consultado el 11 de octubre de 2018 de http://www.cuaed.unam.mx/lecturas/

*Los ejemplos se obtuvieron de:

Arceo. J. L., Ornelas, J. M. y Domínguez, S. (2010). Manual de medicina basada en evidencias (p. 60). México: Manual Moderno.

Bonita, R., Beaglehole, R. y Kjellstróm T. (2008). Epidemiologia básica (2.ª ed.). Washington: Organización Panamericana de la Salud.

Gartner, L. y Hiatt, J. (2008). Texto Atlas de Histología (3.ª ed., p.84). España: McGraw Hill.

Grandini, J. (2009). Capítulo 2. Tanatología. Medicina forense. Aplicaciones teórico-prácticas (2.ª ed., pp. 14-21). México: Manual Moderno.

Moore, K. L., Dalley, F., y Agur, M. R. (2018). Anatomía con orientación clínica (8.ª ed.). Barcelona: Wolters Kluwer.

Navarrete, G. (2003). Histología de la piel. Revista de Facultad de Medicina, 46(4).

Rovasio, R., Eynard, A. y Valentich, M. (2008). Capítulo 1. Métodos generales para el estudio de las células y los tejidos. En Eynard, A., Valentich, M. y Rovasio, R. Histología y embriología del ser humano (4.ª ed., p. 5). Buenos Aires: Médica Panamericana.

Tortora, J. G. y Derrickson, B. (2006). Principios de Anatomía y Fisiología (11.ª ed.). México: Panamericana.

Departamento de Psiquiatría y Salud Mental. (2017). ¿Qué es inteligencia emocional? México: Facultad de Medicina. Consultado el 11 de octubre de 2018 de http://psiquiatria.facmed.unam.mx/docs/ism/unidad2.5.pdf. [Resumen de los artículos de Peter Salovey y Santiago Delgado Campbell.]


Cómo citar

Huerta, C. (2019). Cuadros para organizar información. Unidades de Apoyo para el Aprendizaje. CUAED/Facultad de Medicina-UNAM. Consultado el (fecha) de (vínculo)